Crecí en la fantástica ciudad de Madelia, MN, a unas 25 millas al oeste de Mankato. Madelia es un pequeño pueblo de aproximadamente 2300 habitantes, lo suficientemente grande como para tener todo lo que necesitas, pero lo suficientemente pequeño como para tener una verdadera sensación de pueblo pequeño.
Mi papá era granjero y se jubiló hace unos 5 años. Mi mamá y mi papá todavía viven en la misma granja en la que crecí a 5 millas al oeste de Madelia.
La granja de la abuela y el abuelo es fácilmente el lugar favorito de mi familia en la Tierra para visitar. Es tan tranquilo y hermoso y mis padres nos hacen sentir como en casa cuando los visitamos. Lamentablemente, no vamos a la granja tan a menudo como nos gustaría, pero logramos llevar a casi toda la familia allí el pasado fin de semana (Keegan se quedó en la ciudad en la casa de un amigo).
Era un momento perfecto para visitar la finca ya que era Madelia Park Days. Madelia siempre tiene un fantástico desfile, fuegos artificiales y mucho más, todo culminando en el parque de la ciudad en el extremo sur de la ciudad.
Llegamos el viernes y pudimos estirar las piernas y correr un poco en la granja antes de dirigirnos a Madelia para el desfile (¡el viernes por la noche a las 7 p. m. es genial!).
Si bien todo el desfile fue impresionante e incluyó muchos tractores y autos antiguos, la mejor parte fue un hombre vestido como el flautista de Hamelín con un grupo de aproximadamente 9 gansos caminando frente a él, todos vestidos como Mamá Ganso. Estos gansos permanecieron en una manada perfecta y caminaron de un lado a otro a ambos lados del camino durante el desfile sin mucha (si es que alguna) ayuda del gaitero. Mientras tanto, Piper llevaba un mapache bebé, que dejó caer directamente sobre el regazo de Mikaela. ¡Casi se asustó!
Después del desfile nos dirigimos al parque donde pudimos ver a viejos amigos, comer queso cuajado y beber cerveza Schells.
Después de dar vueltas por el parque durante una o dos horas, fuimos a la piscina local para obtener una vista perfecta de los fuegos artificiales nocturnos. Esta era la parte favorita de Isaiah mientras aullaba y gritaba después de cada destello y explosión.
El sábado fue un gran día que pasé holgazaneando en la granja de mis padres mientras los niños corrían salvajemente. Esto es algo que nos encanta de la granja, realmente puedes dejar que los niños corran sin preocuparse por nada.
Fue un fin de semana fantástico para ver a la familia, los abuelos, los amigos y relajarnos en nuestro destino favorito.